¿Cómo lidiar con personas tóxicas en el trabajo?

Jordi Munyoz

Desde WeMind venimos observando y atendiendo las relaciones entre personas en entornos profesionales. Es frecuente que el objeto de nuestras intervenciones gire alrededor de dinámicas tóxicas que impactan en el desarrollo de la tarea, condicionando los objetivos y resultados.

En el artículo de hoy queremos analizar a las personas tóxicas en el trabajo, cómo identificarlas y ejemplos de conductas tóxicas que pueden generar conflicto en tu equipo. 

¿Qué es una persona tóxica?

Te proponemos un cambio de paradigma: No existen personas tóxicas, lo que sí que hay frecuentemente son personas que, como mecanismo de defensa, desarrollan dinámicas tóxicas. Eso no las convierte en personas o compañeros tóxicos, ya que con toda probabilidad, en otros ámbitos de su vida son capaces de tener relaciones sanas.  Aun así, quienes presentan actitudes tóxicas en el ámbito laboral, deben hacerse responsables de ello y en el sistema organizativo de la empresa, los líderes deben encargarse de poner límites a esas conductas que impactan negativamente en el clima laboral y la tarea en sí. 

Tipos de personas tóxicas en el trabajo

¡Recuerda! Son las dinámicas no las personas las que son tóxicas. Somos conscientes que esto cambia radicalmente el discurso que nos llevan diciendo a nuestro alrededor, pero es así. No existen personas tóxicas ni tipos de personas tóxicas en el trabajo, sino comportamientos tóxicos o dinámicas tóxicas. 

¿Cómo las podemos detectar fácilmente?

Desde WeMind abordamos 6 dinámicas tóxicas y te damos pistas de como las puedes detectar fácilmente:

  1. Abordar conversaciones desde el cinismo. No te dicen las cosas de forma clara, no abordan el tema que les ocupa en realidad.
  2. Ponerse a la defensiva. Se justifican ante dificultades, eluden tomar responsabilidad.
  3. Iniciar bruscamente una conversación. Agreden con el lenguaje verbal y corporal.
  4. Blindarse. Se desconectan de la conversación, se sienten por encima de ella. Miran hacia otro lado.
  5. Hacer presuposiciones, juicios previos. Anticipan como van a ser las cosas, se anticipan a lo que va a suceder impidiendo procesos creativos, genuinos.
  6. Criticar o culpabilizar. Pues eso, critican a los demás, les hacen responsables de lo que sucede. Eluden la responsabilidad.

Cada una de ellas crea un determinado clima, campo emocional en equipos y organizaciones: Enfado, tristeza, miedo, desmotivación, frustración… 

Claves para que no te afecte la negatividad en el trabajo

La buena noticia es que existen algunas claves para que no te afecte la negatividad en el entorno laboral. A continuación te damos algunas con las que trabajamos con equipos en procesos de team o executive coaching con el objetivo de interiorizarlas e incorporarlas en el día a día profesional.

  1. Dirígete a la persona con la que tengas temas pendientes o diferencias. Evita involucrar a terceras personas.
  2. Mantente presente y comprometida con los objetivos aun cuando tu impulso sea el de mantenerte al margen o rendirte ante los conflictos.
  3. No evites las discusiones, aprende a estar cómodo/a en la discrepancia.
  4. No tomes partido solo por el deseo de sentir que formas parte de algo. Tu opinión es valiosa por ser genuina, quizá única y relevante para llegar a acuerdos.
  5. Escucha a tus interlocutores. Escucha, escucha, escucha…
  6. Respira, respira, respira…

La toma de conciencia, metodología y práctica permiten erradicar estas dinámicas funcionales en los equipos de trabajo, así como mejorar las capacidades relacionales y de comunicación entre profesionales.

¿Quieres que te ayudemos a desarrollar el antídoto para estas dinámicas tóxicas? Te podemos asesorar para crear relaciones constructivas y un mejor ambiente laboral. Contacta con nosotros.